Lect.: Hech 4:8-12; 1 Jn 3:1-2; Jn 10:11-18 El uso de metáforas, parábolas, símbolos...en temas espirituales y religiosos tiene la gran ventaja de permitir remontarnos a niveles de la vida y la realidad que escapan al lenguaje y raciocinio habituales. Se tornan en sugerencias, en llamadas de atención para trascender la limitación de los niveles más inmediatos y opacos de la realidad. Sin embargo, el lenguaje simbólico también tiene sus desventajas. Los símbolos y comparaciones suelen estar marcados por una cultura y una época y, con el paso del tiempo, pueden desgastarse, perder sentido o, peor aún, cambiar el que tenían originalmente. Es el caso, me parece, del hermoso "símbolo" del "pastor", sobre todo para un país como Costa Rica en el siglo XXI. Nunca hemos visto pastores conduciendo rebaños de ovejas. Nuestras prácticas ganaderas, y tipo de ganado, en nada se parecen a las de la Palestina de Jesús, del siglo I. En aquel entonces la figura de quien d...
Reflexiones a partir del texto evangélico de la celebración eucarística de cada domingo, considerando su estudio exegético y leído desde algunos de los retos del entorno de nuestra vida actual. Bienvenidos los comentarios.