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Mostrando las entradas de enero, 2011

2º domingo del tiempo ordinario

2º domingo 16 de enero de 2011, t.o. Lect.: Is 49: 3. 5 – 6; 1 Cor 1: 1 – 3; Jn 1: 29 – 34 1. Ya hemos hablado de la polémica que se dio en las primeras décadas del cristianismo, entre los discípulos de Juan el Bautista y algunas de las comunidades de discípulos de Jesús. Explica, en parte, la forma como se escribieron textos como el de hoy que quieren subrayar el papel subordinado del Bautista. Pero, aparte de eso, ese enfoque no nos interesa tanto para nuestras reflexiones aquí en la Eucaristía dominical. Sin embargo, creo que sí nos interesa que la liturgia retome de nuevo la figura del Bautista y que con su forma de actuar y con sus palabras, nos permite perfilar mejor la figura de Jesús. Juan era un hombre extraordinario, lo dice el propio Jesús, un profeta de crítica radical a la religión y a la sociedad judía de su tiempo. Es un hombre de denuncia de todo lo que está mal y de llamado a cambiar las cosas. En mucho, refleja lo que eran los profetas del A.T. Jesús, en cambio, no

Fiesta del Bautismo de Jesús

Fiesta del Bautismo de Jesús, domingo 9 de enero de 2011, Lect. : Is 42: 1 – 4. 6 – 7; Hech 10: 34 – 38; Mt 3: 13 – 17 1. Después de enriquecernos con la lectura llena de simbolismos de los evangelios de la infancia, durante el tiempo navideño, hoy nos encontramos con el primer relato histórico que nos brindan los evangelios sobre Jesús: su bautismo. Sin embargo, para que nos resulte una lectura que alimente nuestra vida espiritual, hay que distinguir varios niveles: el hecho histórico que vieron los testigos y relata Mt, lo que ocurrió al interior del propio Jesús, que evidentemente no podemos ver de manera directa, y luego, las interpretaciones posteriores del hecho, expresadas simbólicamente, de nuevo, por las comunidades cristianas que vinieron después, en los primeros siglos y hasta nuestros días. Como es lógico, en una homilía como esta, solo podemos limitarnos a un solo aspecto, que tenga mayor relevancia para nuestra vida personal y comunitaria: lo que significó para Jesús ese

Fiesta de Epifanía

Fiesta de la Epifanía, domingo 2 de enero de 2011 Lect.: Is 60: 1 – 6; Ef 3: 2 – 3 a. 5 – 6; Mt 2: 1 – 12 1. Como de costumbre, dos pequeñas aclaraciones catequéticas previas. Este texto maravilloso que llamamos la “adoración de los magos” es, como el resto de los evangelios de infancia, de carácter simbólico para expresar lo que las primeras comunidades vivían respecto a la persona de Jesús de Nazaret. Para decir la importancia que él tenía para ellos, Mt utiliza figuras simbólicas, que en la antigüedad se utilizaban para resaltar el extraordinario significado de un personaje político o religioso. Así, por ejemplo, la imagen de la estrella, que expresa también la idea de iluminación, o la de sabios de Oriente, que subraya el valor universal del mensaje de Jesús. Por supuesto, por diversas razones lamentablemente, el texto ha sido leído con frecuencia como un cuento de hadas y adornado con adiciones de la leyenda popular, dándole vida a los personajes, llamándoles “reyes”, inventan